- La Asociación se volcó con Haití tras el terremoto
- Más de 1.600 trabajadores de Caja Mediterráneo participan en iniciativas solidarias y medioambientales
La Asociación de Voluntarios de Caja Mediterráneo, formada por empleados de la entidad, ha conseguido destinar cerca de 300.000 euros durante el último año para desarrollar diez proyectos de cooperación internacional en países de América del Sur y Centroamérica, y desarrollando una labor más intensa en Haití con motivo de las consecuencias del terremoto que sacudió el país en enero de 2010.
La IV Convocatoria de Cooperación Internacional y permitió recaudar un total de 90.876 euros, cantidad que permitió cubrir el presupuesto necesario para llevar adelante los 7 proyectos planteados: Becas para jóvenes ciegos (Arequipa, Perú), Erradicación del Trabajo Infantil en Piura (Perú), Atención para ancianos de la calle (Casma, Perú), Programa Paso a Paso (San Pedro Sula, Honduras), Adecuación de un centro para niños con discapacidad (El Alto, Bolivia), Agua y saneamiento para la escuela de Chiquimula (Guatemala) y la Construcción de una escuela rural en Bee Creek (Nicaragua).
Paralelamente a esta campaña de Cooperación Internacional, la Asociación también reaccionó al devastador terremoto que sufrió Haití en 2010 y se acordó ampliar esta convocatoria, comprometiéndose Caja Mediterráneo a duplicar las aportaciones de sus empleados.
En total se recaudaron 200.126,71 euros, que se han gestionado a través de la oficina que CAM tiene operativa en Santo Domingo. De este modo, se mantuvo un contacto directo con organizaciones que ya trabajaban en Haití con anterioridad al terremoto y que forman parte de la Plataforma de Ayuda a Haití, constituida en República Dominicana.
Una primera cantidad de 70.000 € se destinó para ayuda humanitaria urgente, y una segunda aportación por el resto hasta la recaudación total, para abordar un proyecto de construcción de un centro asistencial para niños en Haití.
Durante el pasado año, la ONG Progressio, gracias a los fondos donados por Voluntarios CAM, procedió a la compra de bolsas de alimentos previstos, compuestos de arroz, aceite vegetal, habichuelas, principalmente; y de los artículos no alimentarios, como mesas, sillas y sábanas, siguiendo los consejos del Naciones Unidas, Oxfam, Action Aid, etc.
Otro de los proyectos realizados en Haití fue la rehabilitación de un centro polivalente gracias a los fondos de la Asociación de Voluntarios CAM, TROCAIRE y OIM. Las Hermanas Carmelitas utilizan este centro para dar cursos de alfabetización dirigidos a la comunidad y talleres para mujeres, así como de escuela pública para los niños de la zona y centro de formación profesional.
Finalmente, la aportación de los Voluntarios CAM permitió la adquisición de una camioneta para la Asociación Amurt-El, que está al cargo de una escuela orfanato en la parte sur de Haití, que les facilita el reparto de comida y su uso para las necesidades del centro de educativo que gestionan.
La Asociación Voluntarios CAM es una entidad sin ánimo de lucro y declarada de Utilidad Pública, cuyos fines principales son impulsar, fomentar y facilitar el desarrollo de actividades sociales entre los empleados de Caja Mediterráneo. Actualmente, forman parte de la asociación 1.636 empleados de la entidad. Para ello se materializan acciones sociales en las áreas de solidaridad, medio ambiente, cooperación internacional, desarrollo social económico y financiero y en todos aquellos campos que puedan suponer una mejora de la sociedad.