Inma Monsó. Autora foto: Susana Alfonso
Valencia, 25/11/2009
Con la capacidad de observación y el placer de narrar que la caracteriza, Imma Monsó seduce por la forma en la que aborda temas como las relaciones familiares, el miedo, el paso del tiempo y la soledad. Sin renunciar al humor, los detalles de la vida cotidiana se muestran en 'Una tormenta', tan desconcertantes como inquietantes. La novela está protagonizada por Sara, una escritora separada que aún no consigue reponerse de la muerte de su hermano pequeño, la única persona a la que admiraba y a quien se sentía mucho más próxima que a su marido o a su propio hijo. Su hermano era el único testigo de su secreto: escribe sonámbula y despierta sólo borra compulsivamente, si borra mucho es un relato, si poco es una novela. Cuando en un encuentro de escritores Sara conoce a Hug, no sabe que su encuentro dista mucho de ser casual. Durante un tiempo, Sara entabla con Hug una relación a través del correo electrónico que la desconcierta. Cuando escribe, el joven se muestra inteligente, divertido y estimulante; en persona en cambio es simple, ingenuo y previsible. Nada en el mundo la puede conmover tanto como la ingenuidad. Nada en el mundo, tampoco, la puede volver más cruel.
La novela comienza cuando Sara se dirige a ofrecer una charla a un pueblo del Pirineo catalán y “se encuentra en la carretera con una ambulancia, en plena tormenta. Habla con los conductores, que transportan a un joven que ha sufrido un accidente en el bosque. El chico acaba de morir y el único indicio que tienen para averiguar su identidad es un móvil, donde hay un último sms que, transcrito dice: «Dejo bacalao en el horno, por si no vienes a la tertulia. Si quieres venir, recuerda: castillo a las 6:30». La escritora descubre así que la persona que ha dejado el mensaje asistirá probablemente a la conferencia, sin saber que la tragedia se cierne sobre su futuro inmediato. En cambio, la escritora lo sabe y, al empezar su intervención, toma una decisión al respecto”.
Imma Monsó desvela que la idea de transformar una charla literaria entre una autora y sus lectores, en una situación de intriga tiene una base real: “Cuando iba a una charla, creo que cerca de Manresa, me encontré con un accidente. Pensé que yo llegaba a la charla antes que la noticia del accidente hubiese podido llegar ahí donde estaba. Estas cosas te quedan y de repente, cuando estas escribiendo una novela, aparecen para que el conjunto de cosas que necesitas cuadren.
La novela empieza con la historia de un desconocido que se acerca de una forma poco convencional a una escritora, buscando una intimidad incómoda para la autora”. Y añade: que “detrás de la historia de intriga en una tarde de tormenta en el castillo de Malmercat, en los Pirineos, hay una reflexión sobre el mundo literario, y sobre donde se ubica el escritor dentro de este mundo. Una cosa es la realidad y otra la ficción, en la ficción podemos decir cosas que en la realidad no nos atreveríamos a decir, no sabríamos decir, o ni siquiera sentiríamos. Todo ha sido gratificante en el mundo literario”.
Imma Monsó retoma en Una tormenta la atmósfera intrigante de sus primeras novelas para explorar la compleja relación entre el escritor y los lectores y para hablar, sobre todo, del miedo: del miedo a perder a los que amamos, a hacernos daño, a no ser queridos o serlo demasiado... Con humor, perspicacia y ritmo, Monsó ha escrito una de esas novelas que se leen de un tirón pero que persisten con tozudez en la mente del lector.
Sobre la autora
Imma Monsó estudió Filología francesa en la Universidad de Barcelona y Lingüística aplicada en las de Estrasburgo y Caen. Publicó en 1996 su primera novela, No se sap mai, un gran éxito cuya traducción al castellano, Nunca se sabe, obtuvo el Premio Tigre Juan a la mejor primera novela publicada en España en 1997. Desde entonces, sus sucesivas obras, siempre escritas en catalán y traducidas al castellano, le han valido el reconocimiento de crítica y público y una larga serie de galardones. Son las novelas Como unas vacaciones y Todo un carácter, y las colecciones de relatos breves Mejor que no me lo expliques y La escuela estrambota, así como el inclasificable Un hombre de palabra.