Valencia, 29/02/2012
Precisamente en esa unidad de los compradores y la dispersión de los vendedores radica el primero de los problemas a los que se enfrenta hoy el sector valenciano del aceite de oliva: “Los grandes, que son muy pocos, están unidos e imponen a los numerosos vendedores, a los agricultores, el precio que en la actualidad no llega ni a cubrir los costes de recogida de la aceituna”, señala José Bellver.